Autora:
Ava Dellaira
Páginas: 327
Editorial: Farrar, Straus and Giroux (BYR)
Todo comenzó con un trabajo para
la clase de inglés: escribir una carta para una persona muerta. Laurel decide
escribirle a Kurt Cobain, quien murió joven como May, su hermana. Luego de
escribir la primera carta, Laurel comienza a escribir muchas más a personas
como Janis Joplin, Amy Winehouse, Amelia Earhart, Heath Ledger, entre otros. Sin
embargo, no le entrega ninguna a su profesora. Laurel escribe sobre muchas
cosas: cómo se siente empezar la escuela secundaria, lo difícil que es forjar
nuevas amistades, cómo es el primer amor, cómo es vivir con padres separados,
básicamente lo que significa ser un adolescente. De esta manera, comienza a
relacionar las cosas que vivió con su hermana y sus experiencias personales,
con las vidas y muertes de estos íconos. Solo de esta forma, Laurel podrá
comprender qué le sucedió a May la noche en que murió y solamente así podrá
verla y recordarla como la persona que siempre fue: adorable, asombrosa y
espontánea.
Tengo que deciros una cosa muy
¿rara?, ¿extraña?... ¿fuerte?
Y es que nunca me había leído
ningún libro en digital, y este es el primero, sí (no es relevante pero quería decíroslo).
De este libro he leído montones y
montones de opiniones de lo más variadas, hay a lectores que les encanta y le
ponen al libro un 5/5, pero en cambio también hay muchos que piensan todo lo
contrario y le ponen muy, muy baja puntuación.
A mí, personalmente, me ha
gustado mucho, habla de una chica, Laurel, a la que se le muere su hermana May
a la que admiraba muchísimo. El libro está escrito en formas de cartas a
personas famosas fallecidas. Las escribe Laurel hablando de su día a día, es
más bien una especie de diario.
Tras la muerte de la hermana de
Laurel, esta decide cambiarse de escuela para evitar a todos los que conocían a May, evitar preguntas, caras y sobre todo
para evitar la compasión de sus compañeros.
Es arte de perder no es
difícil de dominar. Yo lo he hecho. Los días se sienten transparentes, como si
estuviera caminando bajo ese tipo de sol apenas amarillo que atraviesa un
escudo de nubes, demasiado tenue. Una luz vacía. No aterriza.
En los primeros días de su nuevo
instituto, Laurel come y está sola. Prefiere sentarse en un rincón del patio y
observar a la gente. Rápidamente se fija en un chico 2-3 años mayor que ella,
Sky. Así van pasando los días en el nuevo instituto hasta que un día decide
sentarse junto a dos chicas, Natalie y Hannah, con las que empieza a encajar.
Poco a poco Laurel se va abriendo su camino y conoce a más gente. Y… también empieza
a hablar con Sky, sí.
¿Sabes
cuándo crees que conoces a alguien? ¿Más que a nadie en el mundo? Sabes que los
conoces, porque los has visto, de verdad. Y entonces los alcanzas y de repente
simplemente… desaparecen. Pensaste que estaban destinados a ti. Pensaste que
eran tuyos, pero no era así. Deseas protegerlos, pero no puedes.
Después de esto podréis pensar
que es una historia de amor, por esto de que empieza a hablar con un chico y
por el título, peeero tengo que deciros que a mí no me lo ha parecido. Sí, sí
tiene un toque romántico, pero no es todo tan bonito como parece.
Creo que en lo que la autora
quiere que te centres más es en la evolución de la protagonista (o a mí eso me
ha parecido). En ningún momento Laurel le cuenta a sus nuevos amigos lo de su
hermana, en las cartas tampoco cuenta cómo muere, habla de ella como si fuera
una adolescente loca fuera de control, aun así, Laurel la admira. Laurel empieza
a vestirse y comportarse como May. Y en realidad se empieza a convertir en otra
persona.
Como he dicho antes, a mí este
libro me ha gustado mucho, y sí os lo recomiendo, es un libro muy ligero, sencillo
y que se lee rápido.
MERY:)
¡Hola!
ResponderEliminarNo conocía este libro, pero nada más leer la sinopsis me han entrado unas ganas tremendas de leerlo. Me lo apunto. Me alegra que te haya gustado :)
Saludos, me quedo por aquí ^^
¡Hola!
ResponderEliminarWow, no lo conocía pero tanto la sinopsis como la portada me han encantado. ¡Lo apunto!
Gracias por la reseña, ¡un beso!